El representante de la querella particular, Gustavo Briend, pidió este jueves al jurado popular que declare culpables a todos los imputados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski. “Cecilia habló en este proceso, a todos nos indicó y nos pide justicia”, afirmó, al cerrar su alegato en nombre de Gloria Romero, madre de la víctima.
El abogado Gustavo Briend, representante de la querella particular en nombre de Gloria Romero —mamá de Cecilia Strzyzowski—, presentó este jueves su alegato de clausura en el juicio por jurados que se desarrolla en el Centro de Estudios Judiciales del Chaco. Ante los doce ciudadanos que deberán decidir el veredicto, pidió la declaración de culpabilidad para los siete imputados: César Sena como autor del homicidio agravado, y Marcela Acuña y Emerenciano Sena como partícipes primarios, además de los cuatro acusados por encubrimiento.
Briend inició su exposición recordando el lema que acompañó a la querella desde el inicio del proceso: “La verdad no se quema”. Con esa frase, dijo, buscó resumir la esencia del caso. “No hubo un solo día de audiencia en que no se hablara del fuego. Hablamos de fogatas, de huesos quemados, de restos calcinados. Y sin embargo, la verdad, esa verdad, no se quema”, expresó.
El letrado describió a Cecilia como “una joven chaqueña de 28 años, emprendedora, con ganas de vivir y de salir adelante”, y señaló que “tuvo la mala suerte de enamorarse de la persona equivocada”. Según sostuvo, la relación con César Sena “comenzó como un vínculo amoroso normal, pero pronto se transformó en una obsesión”. En su relato ante el jurado, Briend recordó que los primeros signos de esa violencia aparecieron incluso antes del casamiento, y que “a partir de ese día comenzó el principio del fin para Cecilia”.
Uno de los pasajes más recordados del alegato fue cuando el abogado evocó las palabras de la propia víctima, rescatadas de los mensajes exhibidos en el juicio. “Cecilia no quería ser piquetera, no quería usar la remera del Che Guevara y quería salir de ese mundo en el que estaba inmersa. Por eso se convirtió en un escollo para la familia Sena”, dijo. Según la querella, el falso viaje a Ushuaia que le ofrecieron fue una excusa para ejecutar un plan de eliminación.
Briend repasó los testimonios y pruebas incorporadas al debate, entre ellas las declaraciones de Mercedes Flores y los informes periciales sobre los restos hallados en el campo Rossi. “La antropóloga forense habló de una pira funeraria. Dijo que fueron necesarias al menos tres horas de fuego intenso para lograr la fragmentación de los huesos. Ese fue el grado de impunidad que buscaron”, remarcó.
Durante su exposición, el abogado también cuestionó las declaraciones de los principales imputados. “Emerenciano Sena se mostró con memoria prodigiosa para hablar de su vida, pero tuvo una laguna mental justo al referirse al hecho. Marcela Acuña se presentó como una madre sufriente, pero no como una madre que planeó un crimen. No dijeron la verdad”, afirmó.
Antes de concluir, Briend dirigió un mensaje directo al jurado: “Cecilia no está acá para defenderse, pero su cuerpo habló. Habló en la casa de Santa María de Oro, habló en el campo Rossi, habló en el barrio Emerenciano. Nos pidió justicia”.
El representante de Gloria Romero cerró su intervención compartiendo la solicitud de la fiscalía: veredicto de culpabilidad para César Sena como autor del homicidio doblemente agravado; para Marcela Acuña y Emerenciano Sena como cómplices primarios; y para los cuatro restantes imputados por encubrimiento agravado. “Desde la familia digo que esperamos justicia”, concluyó.
Fuente: chacodiapordia.com
“Cecilia habló en este proceso y nos pide justicia”: la querella particular pidió el veredicto de culpabilidad para los siete imputados



